El espíritu colaborativo y el acceso libre marcaron hitos en un proyecto que cuenta con defensores y detractores en medio de críticas por supuestas falencias en el rigor y la calidad de la información.

“Imagina un mundo en el que cada ser humano pueda compartir libremente todo el conocimiento”.
“Compartir libremente el conocimiento” ha sido la premisa de la enciclopedia online puesta en marcha en enero de 2001 por Jimmy Wales y Larry Sanger. En español se inició en mayo de ese año.
Si bien es cierto que hay libertad para que los usuarios creen, corrijan y amplíen el contenido, se requiere que “todos los artículos de Wikipedia tengan referencias suficientes (es decir, indicar la fuente de la información) para que el lector pueda comprobar la exactitud, precisión y neutralidad del artículo, y buscar más información sobre el tema”, aclaran las normas de la enciclopedia.
Por un lado, es innegable el mérito de un canal de conocimiento de alcance global y, por otro, hay expertos que recuerdan que al final ningún compendio de magnitud enciclopédica, incluyendo los tradicionales impresos que tuvieron que adaptarse al formato digital, está exento de defectos.
Hasta la prestigiosa revista Nature publicó un estudio en 2005 sobre la supuesta falta de confiabilidad de Wikipedia que la reconoció como una fuente de consulta tan precisa como la Enciclopedia Británica.
La actualidad informativa digital ha cambiado en los últimos veinte años, los que sobrevive Wikipedia, y se han abierto otros frentes de batalla en Internet con la desinformación y las noticias falsas.
“Cuando creé Wikipedia por primera vez en 2001, Internet era un lugar muy diferente. Solo el 7 % de las personas en todo el mundo tenían una conexión de banda ancha, y la gente dedicaba más tiempo a crear sitios web personales que a obtener sus noticias en línea”, señaló Wales en una nota de prensa que destaca la labor de los voluntarios, gracias a quienes, precisó, “Wikipedia seguirá siendo útil y relevante en los próximos años”.
Al mismo tiempo reconoció que “el mundo se ve diferente al de 2001. En muchos sentidos, es más difícil ser wikipedista. La desinformación se está extendiendo a un ritmo sin precedentes y cada vez hay menos lugares neutrales en Internet”.
Las donaciones y la labor de los voluntarios en todo el mundo son el soporte de la enciclopedia gratuita que figura entre los sitios de Internet con mayor popularidad junto a Google, YouTube y Facebook. Es gestionada por la Fundación Wikimedia, organización sin fines de lucro que abarca otros muchos productos, entre ellos, Wikcionario, Wikiviajes, Wikilibros, Wikinoticias, Wikisource, Wikimedia Commons, Wikispecies y Wikiversidad.
“Hay gente que piensa que Wikipedia, por ser un proyecto abierto a todo el mundo, acabará siendo un producto de baja calidad. No obstante, es quizás precisamente esa característica la que ha hecho posible que actualmente existan artículos buenos o incluso de calidad sobresaliente, y la que hace que su contenido constituya un material en constante progreso”, se señala en la plataforma en español.
En cifras
Global
• 51,6 millones de artículos en 300 idiomas.
• 250 mil editores.
• 2 mil millones de ediciones.
Wikipedia en español
• Cada día se crean alrededor de 400 artículos y reciben más de 35 millones de visitas, mientras más de 126 mil personas en todo el mundo “han hecho al menos diez ediciones”.
La versión inglesa tiene el mayor número de artículos
• 6,2 millones en inglés.
• 2,5 millones en alemán.
• 2,3 millones en francés.
• 2 millones en neerlandés.
• 1,6 millones en español.
Covid
El coronavirus sorprendió al mundo y la enciclopedia libre ratificó su utilidad. La Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Fundación Wikimedia acordaron en octubre pasado una alianza para “ampliar el acceso abierto a la información más reciente y fiable sobre la covid-19”.
Wikipedia “es una de las fuentes de información sanitaria más consultadas”, indicó la OMS en un comunicado de prensa, en el que reconoció el beneficio de ese acuerdo para un mayor acceso “a información verificada sobre la pandemia” y recursos sobre salud pública publicados en la biblioteca multimedia Wikimedia Commons.
La OMS tiene el propósito de evitar las denominadas infodemias que define como “el exceso de información y la propagación rápida de noticias, imágenes y videos inventados o que llevan a equívoco”.
Fotografía: Shutterstock
Edición 464-Enero 2021