EDICIÓN 485

Los pájaros no son reales. Todas las aves que vemos volando son drones con cámaras insertas con fines de espionaje. Entre finales de los años cincuenta y setenta el Gobierno de Estados Unidos, a través de la CIA, emprendió un programa de genocidio de todas las especies de aves en ese país. Asesinó a todos los pájaros vivientes con un arma biológica y, una vez muertos, los reemplazó por robots que tienen un equivalente perfecto con los pájaros originales.
Con esto, el Gobierno implementó, incluso antes de la época de la cibervigilancia, un modelo de perfecta observación de sus ciudadanos. Para luchar contra este genocidio y crear conciencia sobre la masacre de pájaros, se ha creado un movimiento de activistas que hoy en día suma miles de seguidores en sus redes sociales, así como en las marchas que convoca.
Peter McIndoe de veintitrés años, estudiante de la Universidad de Memphis, en un día de aburrimiento vio por su ventana que había una manifestación proaborto en los patios universitarios. A esta concentración también se había unido un grupo de trumpistas que le llevaba la contra. Esa tarde Peter estaba aburrido, así que con una sensación de que no tenía nada que perder, bajó y se unió a la marcha.
Una vez ahí, tomó una decisión que cambiaría el resto de su vida. Recogió un pedazo de cartulina que estaba en el suelo y escribió cinco palabras aleatorias que se le vinieron a la mente: Los pájaros no son reales. “¡Los pájaros no son reales!”, empezó a vociferar en medio de la manifestación pro y contra el aborto. Para su sorpresa decenas de personas empezaron a gritar con él y a indignarse con la declaración.
En los años turbulentos que se han vivido en Estados Unidos desde la administración Trump, Peter empezó a sumarse a toda manifestación que encontraba. No importaba si se manifestaba por Black Lives Matter o contra el aborto, él y sus pancartas sobre los pájaros estaban presentes. Poco a poco, la protesta logró momento y Peter decidió que vivir en una época en la que las conspiraciones están a la orden del día requiere que uno las responda con más conspiraciones para desnudarlas. Como él dice, combatir la locura con más locura.
Desde entonces el movimiento #birdsarentreal ha sumado miles de seguidores. Redes sociales que distribuyen videos, venden camisetas y organizan manifestaciones. Peter McIndoe, además, construyó toda una narrativa histórica verosímil e inclusive contrató a actores profesionales para fabricar videos de supuestos testimonios de exfuncionarios de la CIA que habían participado en la matanza atroz de pájaros décadas atrás.
Hace poco tiempo Peter, quien abandonó sus estudios y se dedicó solo al mantenimiento de #birdsarentreal, salió de su personaje. En una entrevista para el NYTimes reveló la historia del movimiento y confesó por primera vez su propósito lúdico y caricaturesco. La historia, aparte de increíble, nos deja la lección clara de que crear una conspiración es casi cosa de todos los días.