Por Víctor Vergara

Una panorámica vista a Guápulo con un fondo sereno donde se alza el nevado Cayambe se despliega como escenario principal de la sala de estar de la cantante y compositora ecuatoriana Grecia Albán (Latacunga, 28 marzo 1986). 

En su nido musical se respira todo su aire de libertad, energía, continuo sosiego y sus influencias muy marcadas del pop, rock, salsa, música clásica, ritmos afro e indígenas ecuatorianos.

Grecia prefirió conversar desde su cómoda silla de mimbre con Revista Mundo Diners. Sin soltar su taza de café, se rodea de su computadora, su clásico teclado Rhodes Mark II, un par de guitarras acústicas y un ordenado caos de objetos personales en su escritorio.

“Visualizar me ayuda a crear las oportunidades”, tiene escrito en su ventana principal de la sala. Con esa frase, empieza sus días. La música ecuatoriana ha estado presente desde su infancia, con discos y cassettes de su madre Maru por todos lados. Igor Icaza es su primo hermano, miembro de la banda Sal y Mileto. Fue su inspiración desde niña.

A los 11 años entró a la formación musical clásica en el Conservatorio Nacional de Música. A los 16 años se dio cuenta que podía vivir de la música. El canto y violonchelo fueron sus primeras armas para defenderse del mundo.

Es licenciada en música contemporánea por la Universidad San Francisco de Quito. Durante sus posteriores estudios sobre pedagogía musical en Argentina se enamoró del ritmo del candombe. La atrapó la percusión originaria del cono sur.

A continuación, ella se define con sus propias palabras en el siguiente video.

Su estadía de cinco años en tierras argentinas le llevó a cuestionarse sobre sí misma. Su identidad y a dónde iba. “¿Qué es ser ecuatoriano?, ¿de dónde sale nuestro mestizaje y por qué?” se preguntó. Se decidió entonces a contar la historia de su vida, sobre las montañas de Cotopaxi, sus vivencias en la selva y los sonidos de los animales.

El álbum ‘Ecuatorial’ del músico Álex Alvear le abrió la mente a las posibilidades contemporáneas de la música ecuatoriana, para fundirse con el folclore latinoamericano y fusionar sonidos nuevos. El toque sofisticado y dulce del canto de Margarita Lasso “me voló la cabeza”, dice; mientras toma otro sorbo de café.

Los proyectos de Grecia Albán

Recuerda con nostalgia y cariño sus obras creadas en proyectos orquestales y de salsa como ‘Malamaña’ (2008) y su gira por Europa, Estados Unidos y China. Con ‘Bueyes de Madera’ e Igor Icaza conjugó el pop rock latinoamericano a su propio estilo.

El primer disco solista de Grecia vino en el año 2018  bautizado como ‘Mamahuaco’, en honor a la mujer inca y andina, insumisa, que no le teme al trabajo, al frío y que protege con amor su cultura. Resultó en una mixtura musical del mundo contemporáneo y andino, producido por Esteban Portugal.

En las 10 canciones de esta producción, combinó piezas de colegas ecuatorianos y otras compuestas por ella misma. 

También compuso la música para películas y documentales como ‘Tan distintos’, ‘La Tola Box’ y ‘Objetos Rebeldes’. Fueron sus primeros pasos como compositora. 

En enero y febrero de 2020, Grecia armó un trío musical con el ecuatoriano Daniel Pacheco (acordeón) y el chileno Cristóbal Piña (guitarra) para representar a Ecuador en el Festival Mujeres a la Patagonia (Bariloche). Lo describe como “la cosa más bella del mundo para volver a encontrarme con maestras y decir que crecí”.

Concluye que las mujeres deben seguir tomando los espacios culturales que en Ecuador se les han sido negados por tantas generaciones. Ese fue su principal aprendizaje en Argentina.

Su hermana Dayuma se dedica a la antropología y es su mentora cercana. La describe como sensible y a la vez rebelde. Se apoya en ella para siempre orientar sus horizontes en los procesos creativos. Reorientar su brújula.

“Aún faltamos más mujeres instrumentistas, de nivel alto, y creo que es una cuestión de tiempo y procesos. Nos hace falta unirnos las mujeres en Ecuador. Hay muchas cantantes, pero faltan más grupos de mujeres, y no hay tantas productoras musicales o sonidistas, creo que estamos en un proceso en el que se están cambiando los roles”, dice.

‘Sacha Muchacha’ es el nombre de su próximo disco. Contendrá 10 canciones, inspirado en diferentes personajes “que mueven la Tierra”. 

Las montañas, la relación de la Virgen Mercedes con el volcán Cotopaxi y el sincretismo religioso estarán impregnados en las letras con sintetizadores, música electrónica, guitarras y percusiones, todo compuesto por ella misma, con la colaboración de los músicos Alex Alvear y Miguel Sevilla

En su agenda, también formó parte del jurado del ‘Festivalfff’ 2021. Cuenta que las bandas en esta edición fueron muy innovadoras, con lenguajes conectados al Ecuador y de géneros del jazz, clásico, urbano y fusiones interesantes entre lo contemporáneo e indígena.

Grecia Albán
Grecia Albán en su sala de estar en Quito. Foto: Víctor Vergara.

Grecia ofrece también sus clases de canto en línea, junto con varias docentes, basados en diferentes metodologías de aprendizaje de la música. 

Ella disfrutó de su café, con sonrisa permanente y una entrevista Zoom a la espera. Su maestría en gestión cultural también es prioridad.

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