@pescadoandrade
Luego del éxito de Argentina, 1985, Amazon Prime programa “El estudiante”, la primera cinta del director Santiago Mitre. Vale mucho la pena viajar al pasado y verla.
Antes de llegar a salas, la cinta “Argentina,1985”, dirigida por Santiago Mitre, estuvo disponible por largo tiempo en la plataforma de Amazon Prime.
Es más, da la impresión de que los cines esperaron a que la cinta se llenara del buen boca a boca para programarla en cartelera. Y, cuando lo hicieron, no se equivocaron, pues el año no llega ni a la mitad y podríamos decir que ha sido, por lo menos entre películas latinoamericanas, la más comentada de este (y no de otro) 2023.
También, por cierto, algo que nunca sobra decir: traigan más filmes latinos, por favor. Gracias.
Ahora, luego del ruido internacional, la histeria en el Festival de Venecia y la nominación al Óscar, la misma plataforma incluye en su repertorio la ópera prima del director, y tampoco se equivoca al hacerlo.
Se llama “El Estudiante” y se estrenó originalmente en 2011. Ha pasado más de una década, quizás no sea un clásico todavía, pero vaya que vive y late y vibra como una de esas obras que rejuvenecen con el tiempo.
El estudiante de ciencias sociales
Esta película sucede o parte desde las paredes de la UBA, la Universidad de Buenos Aires, que lleva casi 200 años siendo pública, y más precisamente en la Facultad de Ciencias Sociales, así que pueden oler de qué se trata y por dónde van los tiros.
Alumnos que les piden a sus profesores reconocer que Latinoamérica, como la conocemos, está fundada sobre la masacre indígena; profesores que tratan, dentro de todo, de hacerles entender que no existe una sola verdad ni una sola versión, ¿acaso no fue imperialista el Imperio Maya?; paredes grafiteadas con lemas, camisetas de bandas de rock, y mucha propaganda política del tipo lo que viniste a aprender, pibe, es cómo funciona el poder.
El personaje principal se llama Roque Espinoza, viene del interior, de provincia, y pronto muy pronto deja de asistir a clases para dedicarse de lleno a la política universitaria.
En esto hay algo de tierno pero también el inevitable desenlace desmoralizador. Roque se mete en la campaña de un profesor que persigue la presidencia, no sólo que se come sino que se traga el cuento y milita, hasta convertirse en una especie de peón que cree conocer las manos que lo mueven pero sin duda ignora en qué dirección o por qué motivos.

El futuro no les pertece
Así, ‘El Estudiante’ se permite contar una primera decepción ante el mundo real, un momento que marcará el resto de vida que les quede a los estudiantes, que a su vez pasan de jalar líneas en baños estrechos y de procurar todo el sexo posible a darse cuenta de que el futuro no les pertenece.
El agua tibia no existe: puedes entrar al juego político o quedarte fuera.
Pero lo que más emociona es que, teniendo a mano “El Estudiante”, uno puede ver y disecar el comienzo en la carrera de Santiago Mitre, porque una cosa es verlo desde el éxito hacia acá y otra muy distinta meterse en los archivos.
En ‘Argentina,1985’ no existen inseguridades ni pasos en falso (para bien y para mal), pero en ‘El Estudiante’ la cámara tiembla, la luz no siempre pega donde debería, quizás hasta falten objetos de utilería, y es así como el peso de la cinta cae casi entero sobre la experiencia humana.