Corren, suben y bajan escaleras, llaman un ascensor y crean una obra pictórica.

Aunque a Xiaomi se le asocia de inmediato con los teléfonos inteligentes, otro campo de investigación y desarrollo de su interés es el de la robótica.
CyberDog es su primer robot biónico y, aunque el lanzamiento oficial data de 2021, fue una de las novedades que presentó en el Mobile World Congress 2022 (MWC) de Barcelona.
Cámaras, sensores e inteligencia artificial permiten que este perro robot corra, dé volteretas, se incorpore sobre sus patas traseras, se siente o se acueste, además de que soporta hasta tres kilos de peso y se desplaza a una velocidad de 3,2 metros por segundo, según el portal.
La nueva mascota de Xiaomi, de venta solo en el mercado chino y en un proyecto abierto a desarrolladores de todo el mundo, está programada para una experiencia amigable con los usuarios, por ejemplo, a través del reconocimiento facial, y para ser controlado de manera remota, por voz o con una app para el teléfono móvil.
Otras máquinas cuadrúpedas
Boston Dynamics es una de las compañías reconocidas en el desarrollo de robots con movilidad y destrezas. Por ejemplo, su cuadrúpedo Spot ha sido utilizado por el parque arqueológico de Pompeya en tareas rutinarias de inspección, guardianía y en el registro de datos en áreas subterráneas de la famosa ciudad italiana.

También fue un Spot el que intervino en crear la pintura “Sunrise March” que fue subastada en cuarenta mil dólares en beneficio de los refugiados ucranianos, una iniciativa de la artista polaco-estadounidense Agnieszka Pilat, quien mostró el proceso creativo en su cuenta de Instagram.
La Escuela Politécnica Federal de Zúrich, más conocida como ETH Zurich, ha ido un poco más lejos con Swiss-Mile, un robot de cuatro patas con ruedas que se convierte en bípedo y en vehículo para tareas logísticas y de carga.
Su laboratorio de sistemas robóticos creó este artefacto de funcionamiento autónomo con inteligencia artificial, capaz de desplazarse a 22 km/h, bajar y subir escaleras, erguirse en dos patas y llamar a un ascensor. En el futuro la meta es que sostenga paquetes y abra puertas.

Te podría interesar:
- Arístides Vargas: monólogo de un elegido
- ‘La muerte de Stalin’ y las ridiculeces del poder
- “El Festival de Música Sacra es un respiro en medio de tanta vorágine”
- ‘Q Galería’, un espacio para acercarse al arte contemporáneo en Cumbayá
- Daniel Espinosa narra el mundo moderno desde la estética precolombina