
Esteban Mayorga
Festina Lente, Ecuador, 2023
Contrario al título, Esteban Mayorga desborda una capacidad de habla que alienta al lector a no desconectarse de un libro cargado de melancolía y humor.
Parecería que el protagonista sabe que a los cuarenta años la fiesta está por terminar. Los sueños se esfuman y solo queda conformarse con disfrutar el camino. Pero, ¿cómo hacerlo en medio de infidelidades y celos? ¿La venganza será la solución?
La tensión de continuar con alguien cuando ya no hay amor es la semilla del rencor, y para mitigarlo solo queda drogarse o llorar. Nuevamente el autor apela a la tragedia shakesperiana de El rey Lear no solo para titular su novela, sino para reflexionar que todo acto tiene su consecuencia.
Su personaje sufre de insomnio, es depresivo y, por si fuera poco, va perdiendo la vista. Mientras camina de madrugada por los rincones de su casa, también recorre los recovecos de su memoria. Dialoga con su soledad, con su gato y con su pequeño hijo, a quien le retrata su niñez edulcorando la realidad. Y, con una sutileza narrativa, plantea que la paternidad puede ser tan frágil como la niñez.
En medio de su trabajo como docente e investigador, este hombre tratará de describir las representaciones que le hacen a uno ecuatoriano. Y todo esto le hará ver lo denso de no valorar lo que ya se da por hecho.
Con esta obra Mayorga se ratifica como uno de los narradores más experimentales de nuestra literatura. Esta historia posee un lenguaje que no se vuelve impenetrable, tratando de entender a la escritura como un diálogo, es decir, como una condición de existencia.